Ruta 21 kilómetro 264, entre Carmelo y Nueva Palmira, (a la altura del Arroyo Las Víboras). Hay cartelería.
Un tesoro patrimonial de Uruguay resiste el paso del tiempo sorprendiendo a los visitantes por lo increíble que es esta construcción de 1732.
Rodeada de un monte de ombúes, espinillos, palos borrachos, talas y otros arbustos autóctonos, a diez kilómetros de la ciudad de Nueva Palmira y trece kilómetros de Carmelo. Se trata de una de las construcciones más antiguas del país, declarada Monumento Histórico Nacional.
La historia de esta estructura colonial comienza cuando el aragonés Don Juan de Narbona adquiere cerca de cuatro leguas cuadradas, limitadas por el Arroyo Sauce, el Arroyo de Las Víboras, el Arroyo Polanco y el Río Uruguay. Narbona se trasladó desde Buenos Aires a la Banda Oriental en busca de cal para la construcción.
La Capilla de Narbona es el sepulcro del fundador de la estancia. Se conserva de aquella época una imagen de la Virgen de la Candelaria y sobre el piso hay unas tapas de madera que llevan a túneles subterráneos. Estos túneles llegan hasta el arroyo y fueron construidos como medio de escape por los constantes ataques que ocurrían en la época colonial, pero también fueron utilizados para retener a los esclavos que traficaba el español.
María Julia Casanova tiene a su cargo Capilla Narbona, donde nació. Cuenta que sus padres llegaron al lugar en 1929 y vivieron toda su vida ahí, dando a luz a sus cuatro hijos. Pasó muchísimos años sin cobrar un sueldo, pero igualmente dedicada a cuidar todo el predio y a recibir visitantes.
En setiembre de 2014 se firmó un Acuerdo por el cual el Ministerio de Educación y Cultura transferirá fondos al de Transporte y Obras Públicas para las obras de apuntalamiento de este auténtico Patrimonio Histórico Nacional. Por su parte, el Turismo y Deporte se encargará de la promoción turística.
Descubriendo Uruguay
Todo Uruguay