Patrimonio Herido
Las ciudades uruguayas han sido testigos de la erosión de su legado arquitectónico. Edificios que una vez narraron la historia y cultura de nuestro pueblo hoy se encuentran en riesgo, heridos por el abandono, la negligencia y la falta de políticas de conservación.
Cada fachada deteriorada y cada estructura en peligro de demolición es un recordatorio de la fragilidad de nuestro patrimonio y la urgente necesidad de actuar para preservar lo que aún queda en pie.
Montevideo
Atahualpa
Casaquinta Compte
Av. Burgues 3231 esquina Luisa Luisi.
Esta maravillosa casona de estilo Art Nouveau de fines del siglo XIX pertenecía al empresario Pedro Compte, quien tenía fábrica de galletitas, licores y envases.
La construcción está firmada por el técnico A. M. Seguí, al igual que la de Staricco. No se conocen más datos de la misma.
La casona por falta de mantenimiento está muy deteriorada, con hundimiento de techos. La empresa Alonso Hermanos es la propietaria del padrón.
En el pequeño jardín que subsiste alrededor de la casona, perduran dos ejemplares de Araucaria angustifolia, "Pino de Brasil" protegidos por decreto de la Junta de Montevideo por su edad.
Casaquinta Staricco | "Villa María"
Av. Burgues 3165-69.
Casa quinta en cuya fachada y verjas predominan elementos característicos del Art Nouveau. Aunque se desconoce la fecha exacta de su construcción, dados los elementos expresivos utilizados, podría datar de la está firmada por primera década de este siglo, está firmada por el técnico A. M. Seguí.
Su propietario era el señor Pedro Staricco, que estaba casado con María Font, cuya quinta familiar estaba enfrente (Burgues 3170), el matrimonio tenía un hijo que se llamaba como su padre. El señor Pedro Staricco era propietario del Bazar Colón.
La casona original se encuentra separada de la vía pública por un amplio jardín en el que subsisten algunas especies valiosas, estando delimitadas por una verja de neto corte Art Nouveau y bella concepción.
El edificio presenta una volumetría asimétrica constituida por dos cuerpos relacionados por un acceso retranqueado. El cuerpo de la izquierda se encuentra flanqueado por una loggia en su casi totalidad. Esta loggia tiene barandas de mampostería con un trabajo calado propio de alguno de los estilos provinciales franceses -notoriamente el bretón- consistente en "roues de quenouille" (ruedas de rueca) o "roues de gouvernail" (ruedas de timón), lo delicado de este trabajo y su valor estético, así como la coloración y textura del material utilizado, igual a la del resto del edificio, descarta la posibilidad de que se trate de un agregado posterior, sino que por el contrario, todas las barandas de la loggia debieron perdido poseer tal ornamentación, habiéndose perdido las correspondientes a la fachada lateral sur.
El acceso, con importante puerta de cuatro hojas en hierro y rejas del mismo material, se alcanza mediante una escalera de mármol de Carrara cuyo desarrollo se realizó en forma lateral al mismo, contando con baranda con balaustres de mampostería de hermosa factura. Al final de esta escalera se encuentra un farol de pie de hierro fundido, que originalmente contó con tres brazos y sus correspondientes globos de opalina.
El segundo cuerpo presenta como detalle relevante un gran vano en forma de herradura con profusa ornamentación característica del "Art Nouveau".
Informe técnico del arquitecto Gonzalo Nario Álvarez de la casa
quinta de Staricco.
Plaza Atahualpa
Cubo del Norte y Florencio Escardó.
«Inaugurada el 7 de noviembre de 1914 la Plaza contaba con treinta bancos de algarrobo pintados de color blanco; en el centro un farol de cuatro luces rodeado de un canasto de flores y en los ángulos se alzaban cuatro faroles pintados de color bronce. El tranvía eléctrico No.20 de «La Transatlántica», con destino a Capurro, atravesaba la Plaza en su recorrido» …
Hoy la plaza cuenta con solo cuatro bancos, no tiene el farol y tampoco esta iluminada. Las vías que pasaban por el medio de la plaza no se ven (quizás las retiraron) y nada puede hacer creer que por ahí paso un tranvía.