Rambla Republica de Chile 4215.
El Museo de Historia Natural Dámaso Antonio Larrañaga fue creado el 27 de mayo de 1956 dependiendo del Concejo Departamental de Montevideo
El edificio en el cual funciona el Museo Dámaso Antonio Larrañaga fue diseñado en 1925 por los arquitectos Canale y Mazzara por encargo de Visconti Romano, dueño de un cabaret situado en los altos del Teatro Artigas, con la intención de construir un “Café Morisco”.
El 26 de julio de 1929 las autoridades comunales decidieron ampliar y refaccionar el edificio tomando como base la antigua morgue del cementerio de Buceo.
En 1930 comenzó su construcción pero, fracasado el propósito comercial que le dió origen, en 1934 fue cedido por parte de la Intendencia al Servicio Oceanográfico y de Pesca y se tomó como sede de la Estación Oceanográfica, funcionando como tal hasta 1940. Luego se le agregó un museo y pasó a denominarse "Estación Oceanográfica y Museo”. La estación se cerró en la década del 40' pero el museo se mantuvo.
El 27 de mayo de 1956 reabrió como "Museo Zoológico Dámaso Antonio Larrañaga" dependiendo del Concejo Departamental de Montevideo, siendo el único de los museos de ciencias naturales de Montevideo con referencia solamente a la Zoología.
Dámaso Antonio Larrañaga (1771-1848) fue un senador, naturalista, botánico y obispo diocesano de la Iglesia Matriz. Contribuyó a la fundación de la Biblioteca Nacional y de la Universidad de la República. Fue delegado a la Asamblea Constituyente de las Instrucciones del año XIII.
Fundó en 1821 la Sociedad Lancasteriana (nuevo método de enseñanza). En 1837, fue nombrado co-fundador del Museo de Historia Natural de Uruguay. Su obra fue reconocida por los grandes científicos del siglo XVIII e Identificó 646 especies botánicas nuevas.
Introdujo las ostras en el Río de la Plata comenzando con su reproducción en las costas de la Isla de Lobos y Maldonado. También llevó la morera y fomentó la producción de gusanos de seda. Se destacó en el “Diario de Viaje de Montevideo a Paysandú”(1815), que contiene observaciones sobre flora y fauna de los lugares visitados. Figuran además descripciones de árboles y plantas de interés medicinal.
La función del museo es esencialmente didáctica y las actividades y programas se orientan a la difusión de conocimientos relativos al sector de las Ciencias Naturales. Aquí hay numerosas especies de fauna autóctona, haciendo particular enfasis en aquellas que por alteraciones ambientales están en peligro de extinción.